¡Cuidado! ¿Sabes si el sostén que usas podría causarte cáncer de mama?
Uno de los tipos de cáncer más frecuentes en el mundo es precisamente el de...

Uno de los tipos de cáncer más frecuentes en el mundo es precisamente el de mama, y entre muchos mitos que existen entorno a este padecimiento se encuentra el de “el sostén que usas lo puede provocar”, pero qué hay de cierto en esto.
A pesar de que en el mundo hay muchas teorías que señalan esto, como la desarrollada por Sydney Ross Singer y Soma Grismaijer en su libro Dressed to Kill, en la que aseguran que usar un sujetador con varilla durante más de 12 horas seguidas era una causa del desarrollo de cáncer de mama.
Según estas teóricas, esto se debería a que al ejercer presión sobre su torso, generan una supuesta restricción en el sistema linfático, haciendo que se acumulen toxinas en las glándulas mamarias.
Asimismo, otra teoría que corrió de manera viral por las redes sociales es la que sugiere que un tipo de sostén chino contaba en su interior con bolsitas de plástico rellenas de un líquido que supuestamente es cancerígeno y que sirve para hacer un efecto de “push up”,
Aunque la Sociedad Estadounidense del Cáncer ha desmentido en distintas ocasiones que el sostén “provoque” la enfermedad.
¿Y qué hay del líquido dentro de los sostenes chinos?
Hace unos años, Tyrone Escoto, un joven preocupado por la salud de su novia, decidió abrir sus sujetadores y encontró las extrañas bolsas dentro por lo que se dio a la tarea de investigar de qué se trataba.
Tras compartir las imágenes del sospechoso líquido, su caso se hizo viral. Hasta que Thanh Nien News, un medio asiático reveló que esos sujetadores son producidos en China sin ningún estándar de calidad y, en algunos casos, contienen una solución de un aceite derivado del petróleo que contiene hidrocarburos aromáticos.
En otros más, se trata simplemente de glicerina.
Es importante aclarar que NO existen evidencias de que los rellenos de sostenes sean factor de riesgo de cáncer de mama, aunque no está de más evitar usarlos… ¿verdad?
En todo caso, lo mejor es cuidar la ropa que utilizamos y los materiales que entrarán en contacto con nuestras zonas más delicadas.